El gobernador de Santa Cruz, Claudio Vidal, fue increpado por trabajadores que exigen la reactivación de las obras hidroeléctricas en Santa Cruz, pero su respuesta dejó mucho que desear. “Hicimos lo que pudimos, pero la última decisión no es nuestra”, comentó Vidal, mientras el ministro Álvarez urgió a “dejar de lado las disputas políticas” y encontrar una solución al conflicto.
Vidal aseguró que su administración ha hecho todo lo posible a nivel provincial, los trabajadores no recibieron respuestas satisfactorias. “Lo que pasa es que la responsabilidad de reactivar las obras no depende de la provincia”, insistió el gobernador, sin asumir que su inacción y falta de compromiso han llevado a esta situación de estancamiento.
Los trabajadores, quienes se mostraron decepcionados por las excusas del gobernador, afirmaron que no es suficiente con promesas vacías y que requieren hechos concretos para asegurar el futuro laboral de miles de familias. “En ningún momento se los abandonó” dijo Vidal, pese a que 1.800 trabajadores perdieron sus empleos en marzo de 2024, casi al inicio de la gestión del actual Gobierno.
“Esta situación es otro ejemplo de cómo los santacruceños seguimos pagando las consecuencias de decisiones erradas del pasado”, expresó el gobernador junto al Ministro de Energía, Jaime Álvarez, que fue parte del Gobierno de Daniel Peralta y parte del equipo de Julio De Vido.