A un año de la gestión del Intendente Pablo Carrizo, nada ha cambiado, la obstinación a la hora de rectificar errores, descuidos o situaciones como la de unas largas vacaciones por meses a cargos políticos que luego vuelven con sueldos pagos sin haber brindado contraprestación alguna, continua luego de un año de gestión.
Una clara muestra de su PRECOCIDAD, es la falta de respuesta oficial de la Municipalidad de Caleta Olivia acerca del siniestro ocurrido el miércoles a la madrugada en la que se estima la pérdida de más de un centenar de motos. ¿Quién se hace cargo? ¿Fue un descuido o intencional?
El supervisor de Tránsito y Transporte, Esteban “Taby” Rodríguez se encuentra en el ojo de la tormenta tras un sospechoso incendio en la base operativa de Tránsito, sucedido días después del planteamiento de una solicitud de informe de vehículos que se hallaban en el lugar y que el Supervisor Anterior hubiera realizado y que actualmente no estaría coincidiendo con el registro anterior, pese a la existencia de cámaras de seguridad en todo el predio.
A esto se le suman las denuncias públicas y demás, por liberar automotores del Depósito Municipal, que deberían haber estado en custodia de la AUTORIDAD DE APLICACIÓN “JUEZ de FALTAS”, sin ningún tipo de formalidad ni tramite normado, sin pago de aranceles de rehabilitación para circular, gastos de estadía, ni acarreo, entre otros.
Frente al silencio cómplice, que enmudeció a funcionarios de la Ciudad, se encuentra la inquietud de los damnificados quienes denuncian las prácticas ilegales de supervisores que deberían velar por la integridad de los bienes ajenos, A.N: “Desde la ‘Muni’ no me dieron una solución, mis amigos ya habían tenido problemas con algunas piezas que estaban flojas o que parecían ‘toqueteadas’, o no eran las mismas”, aseguró el damnificado. También dijo: “No quiero pensar lo peor, pero nadie aclara nada y la ‘Muni’ parece conocía de antemano lo que pasaba”.
A “Taby” Rodríguez lo señalan trabajadores por su autoritarismo, excesos y violencia sobre el personal, con antecedentes verificables en sede judicial, cuando también cumpliera deberes como funcionario en la gestión de un anterior intendente.
NOTA DE COLOR;
En un claro ejemplo de su ineficiencia, ordenó el traslado de trabajadores del sector de estacionamiento medido a funciones de inspectores de tránsito, a pesar de que estos empleados no fueron contratados para esa tarea, carecen de la capacitación necesaria y su firma no es apta para esta tarea.
Además, se denuncia que estos trabajadores no cuentan con el estatus de funcionarios públicos, lo que agrava aún más la situación.
Estas irregularidades no hacen más que destapar una olla de las situaciones que ocurren dentro de la Gestión de Pablo Carrizo, donde Funcionarios son apuntados con el dedo por trabajadores como principales actores de prácticas ilegales y cómplices de otras.